Para realizar nuestra reseña número 50 hemos parado en la Estación de servicio de Repsol de la N-627, Km. 51,5. Este típico restaurante de carretera, no muy amplio y con decoración anodina esconde un tesoro: una tortilla de patata para quitarse el sombrero. Las raciones generosas, con la patata bien frita y huevos camperos cuajados al punto, son contundentes. Ofrecen un único tipo de tortilla, ¿para qué hacer variaciones si has logrado la excelencia? Parada obligatoria si transitas entre Burgos y Aguilar de Campoo.
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